Contrastes en blanco y negro, azules eléctricos que se combinan con puntas más oscuras llenas de volumen y movimiento. Tonos nude que suavizan el invierno, rojos y burdeos que continúan en tendencia. Estampados animales que continúan potenciando nuestro querido leopardo ya sea en tonos grises o camel, sin olvidarnos de un toque de cebra que continua dejándose ver.